Solo hay que cruzar la calle...

¿Qué hice?

Participé en el Campamento Amoverse durante dos años. Es un campamento en el sur de Madrid (Vallecas) con jóvenes con familias desestructuradas y problemas sociales. Me sirvió para darme cuenta que no hace falta irse muy lejos para ayudar a gente realmente necesitada; basta con cruzar la calle.

El campamento es únicamente en verano, pero durante todo el año se puede ir un día a la semana para acompañarles y ayudarles en sus tareas diarias. Además de hacer deporte, aprender las nuevas tecnologías y jugar.

¿Qué hace la Fundación?

La Fundación Amoverse nace en el año 2001 en el barrio madrileño del Pozo del Tío Raimundo (Vallecas) con el ­fin de acompañar a los niños/as, adolescentes, jóvenes y sus familias en su inserción social y laboral, impulsando sus oportunidades de aprendizaje, crecimiento e integración. Hoy cuentan con diferentes centros en Vallecas y Tetuán, Madrid, desde donde llevan a cabo programas integrales de Acompañamiento Familiar, de Intervención socio-educativa e Intervención socio-laboral.

La Fundación Amoverse tiene su origen en la labor que, personas vinculadas a la Compañía de Jesús, venían desarrollando desde el año 1995, con niños/as, adolescentes y jóvenes (NNAJ) en difícil situación social, en la Parroquia San Raimundo de Peñafort del Pozo del Tío Raimundo.

Durante esos años, se desarrolló un proyecto socioeducativo integral de prevención para NNAJ y sus familias fundamentalmente a través de la educación no-formal y el apoyo al estudio.

Conclusión

No debemos olvidar las situaciones que tenemos tan cerca de nuestra casa, no hay que irse lejos para ayudar. En mi caso, tanto el verano que fui al campamento de verano (nunca mejor dicho) y los 2 años completos que estuve yendo a acompañar a los niños en sus estudios y actividades deportivas fueron dos años en los que ir cada día que iba a verles me cambiaba como persona, y traer todas esas experiencias a mi día a día, a tan solo un par de barrios al norte, era muy importante para mi.